Viñas del Vero

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Viñas del Vero debe su nombre a un río de la comarca del Somontano, al pie de los Pirineos, famoso por sus barrancos, gargantas y cañones. Viñas del Vero S.A. se establece en Somontano a finales de 1986 con la adquisición de 550 hectáreas de terreno en Barbastro y otras poblaciones cercanas. En 1987 comienzan a replantarse los terrenos con viñedos de las variedades tradicionales de la región (Tempranillo, Moristel, Garnacha y Macabeo), junto a otros de distintas procedencias (Chardonnay, Gewürztraminer, Cabernet Sauvignon, Merlot y Pinot Noir).

Los primeros vinos de la bodega aparecen en el mercado en la primavera de 1990 y son elaborados en una bodega experimental de Salas Bajas. En 1987, la empresa había adquirido la finca “San Marcos” para la construcción de la nueva bodega, que se inauguraría en julio de 1993. En ella, se desarrolla todo el proceso de elaboración de los Viñas del Vero, desde la selección de la vendimia hasta la crianza y el embotellado. La bodega tiene una capacidad de 70.000 hectolitros y cuenta con 250 depósitos de acero inoxidable y 8.000 barricas de roble americano y francés.

Actualmente, Viñas de Vero es la primera bodega de la denominación de Somontano por su volumen y calidad de producción. La empresa cuenta con 1.100 hectáreas de viñedo y produce 6,5 millones de botellas al año. Los vinos de la bodega se pueden encontrar en más de 40 países de todo el mundo.

Viñas del Vero y otras bodegas de la zona constituyeron en 1985 la Denominación de Origen Somontano, que, más allá de ser un parámetro de calidad, significa respeto a un origen geográfico y a una tradición, ya que todas las uvas empleadas en la producción de sus vinos proceden de viñedos del Somontano. Somontano es una Denominación de Origen joven y con carácter dinámico, que en pocos años ha sabido ganarse una excelente reputación vinícola. En la actualidad, la bodega exporta el 30% de sus vinos a diferentes países de todo el mundo.

El Somontano es una comarca alto aragonesa privilegiada tanto por su gran riqueza natural como por la belleza de su patrimonio histórico (Barbastro, Alquezar, Torreciudad, Arte Rupestre). Regado por el río Vero y cercano a los Pirineos, presenta unas excepcionales cualidades para el cultivo de la vid. Esta zona de tierra ondulada, de suelos pardos calizos, muy permeables, con una pluviometría anual de 600 Mm. y 12 grados de temperatura media, con inviernos extremados y veranos cortos, ofrece unas condiciones agroclimáticas inigualables para obtener excelentes vinos. Los romanos ya las descubrieron hace casi 20 siglos y los amantes de los buenos vinos siguen apreciándolas hoy.

En su paisaje, se combinan el influjo de los cercanos montes del Prepirineo, donde se encuentran el Parque Natural de la Sierra y Cañones de Guara, la Sierra de Salinas, el paso de los ríos Vero y Cinca junto a un horizonte de hermosos campos de viñas, olivos, carrascas y almendros.